4. Hay que aprender a edificar el altar a Dios / aprender a adorarlo.
Seguramente, el profeta tomó al mejor animal, la hora estaba llegando.
Cuando le digo que es necesario aprender a adorar, es porque hay una hora para hacerlo, una forma de hacerlo y en nuestro caso, una forma clara, en nuestra mente, de hacerlo. Usted tiene su lugar donde intima con el Señor, pero tenga cuidado de que cuando vaya a ese lugar, sea el momento, porque Dios estará allí y contestará. Esos tiempos de adoración son especiales.
Elías restauró el altar, lo que otros habían destruido y lo puso como a Dios le agrada. Cuando usted adore a Dios, ponga el ambiente como a Él le agrada. No puede haber interrupciones.
1º Reyes 18:36 (TLA): “Cuando llegó el momento de quemar el toro, el profeta Elías se acercó y le pidió a Dios: ¡Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob! Haz que hoy todos sepan que tú eres el Dios de Israel y que yo soy tu servidor, y que he hecho todo esto porque tú me lo has pedido.”
Usted ya tiene clara su identidad y va a enfrentar las situaciones, valientemente, como lo hizo Elías; ya estableció las condiciones, puso las reglas en su vida, cómo se iba a preparar todo, edificó un altar y después:
5. Orar correctamente y por los motivos correctos.
Elías usó las palabras correctas en el momento de la oración, se acercó a Dios y oró: “¡Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob!, que hoy se sepa que tú eres Dios” Elías no imploró por respaldo. Elías resaltaba la confianza que tenía en Dios con sus palabras y su oración y el amor que le tenía a Él y a las personas, porque el deseo de su corazón era que el pueblo supiera que Él es Dios.
Cuando le demos la prioridad al Señor en nuestra vida, muchas cosas cambiarán. A veces pensamos en un buen negocio y tenemos la oportunidad, la capacidad, pero ¿cuándo hemos orado y llegamos a la presencia del Señor, en nuestra primera oración, le ponemos el negocio en sus manos y le decimos “lo que quiero es que sepan que tú estás conmigo?” Habrá bendición, prosperará, pero lo primordial debe ser que los demás sepan que yo, como hijo, soy bendecido. Debemos hacer la oración correcta y con los motivos correctos. Ojalá que lleguemos a tener una mentalidad como la de Elías, si tuviéramos esa mentalidad para todas las áreas de nuestra vida, les aseguro que nos iría mucho mejor.
Todo lo que usted emprenda y haga, que el que se lleve la gloria, sea Dios, un título, salud, negocio, profesión. La Biblia dice que toda sabiduría y todo conocimiento viene de Jehová, por eso es que le doy la gloria a Dios con lo que hago y levantar el nombre de Dios.
Elías termina diciendo:
1º Reyes 18:37: “Contéstame, mi Dios; contéstame para que este pueblo sepa que tú eres Dios, y que deseas que ellos se acerquen a ti. En ese momento, Dios mandó fuego, y quemó el toro, la leña y hasta las piedras y el polvo. ¡También el agua que estaba en la zanja se evaporó! Cuando todo el pueblo vio eso, se inclinó hasta tocar el suelo con su frente y dijo: ¡El Dios de Israel es el Dios verdadero! ¡Él es el Dios verdadero!”
Quedó claramente en el corazón de los israelitas quién es Dios y ya no había dos pensamientos. En el siguiente versículo, el profeta manda a decapitar a lo9s profetas de Baal, según la ley de ese momento: todo aquel que anuncie o que profese a otros dioses, que le sea quitada la cabeza.
Decapite a todos los baales espirituales que hagan estorbo, aquellas cosas que ocupan el primer lugar, el que le corresponde al Señor. Recuerde que usted tiene la autoridad de Dios, tiene identidad del Señor, es un adorador y usted es quien pone las reglas y decide cómo va a vivir. Si usted decide seguir viviendo con los baales o distractores que lo apartan de Dios y lo distraen, aténgase a las consecuencias, porque vivirá con problemas; si por el contrario, se despoja de esos baales, nos esperan días gloriosos, de ver cosas sobrenaturales de Dios en nuestra vida. El fuego era la misma presencia de Dios.
Disfrutar de lo sobrenatural de Dios, de las sanidades, de las liberaciones, de la restauración financiera, de los pensamientos, eso no fue solo para esos tiempos, es también para ahora. No nos perdamos lo maravilloso y sobrenatural de Dios, por estar teniendo dos pensamientos. Creámosle y confiemos solamente en Él y verá cómo Dios lo saca de donde está, para no seguir perdiendo las bendiciones que Él ha preparado para usted. No temamos, porque Dios está con nosotros. Lo primordial, es que el nombre de Dios sea exaltado.