4. Sé un padre amoroso y expresivo .Lucas 15:20-21 (BLS): “Entonces regresó a la casa de su padre. Cuando todavía estaba lejos, su padre corrió hacia él lleno de amor, y lo recibió con abrazos y besos. El joven empezó a decirle: ¡Papá, me he portado muy mal contra Dios y contra ti! ¡Ya no merezco ser tu hijo!”

Lo que nosotros hablamos, tiene que ir respaldado por nuestras actitudes. Note esto: el padre no puede haber una expresión de abrazos y besos, si antes no existe amor en nuestro corazón. Muchos de los problemas de pandillas que hoy tenemos con los jóvenes guatemaltecos, es por falta de amor y de figura paterna.

Dice la Biblia que fue el padre quien vio al hijo y corrió. La iniciativa la toma el padre y no puede salir corriendo a abrazar y besar a su hijo, si no está lleno de amor.

Quiero pedirles a todos los padres, que de hoy en adelante, procuren llenarse del amor de Dios. Nuestros hijos no son los culpables de las situaciones que nosotros estamos pasando, sino nosotros, por malas decisiones y por no depender de Dios totalmente; nosotros como hijos, debemos honrar a nuestros padres, bendecirlos y mientras ellos estén vivos, hacer lo mejor que podamos por ellos. Pero note que fue el padre el que corrió, lleno de amor, lo recibió con abrazos y besos.

Hay cosas que en nuestra cultura guatemalteca que, cuando vamos a la Palabra, da vergüenza que las estemos practicando, por ejemplo, por qué no abrazar, besar, acariciar, hacerle cosquillas, jugar con un hijo, pero nos cuesta mucho por la cultura machista. Esa cultura dice que es mejor tener esos gestos con las mujercitas, porque “varón con varón” no es conveniente. ¡No! Es necesario que abracemos, besemos y bendigamos a nuestros hijos, porque es parte de nuestra herencia. Eso es algo con lo que he luchado, porque he sido muy simple, pero hace tiempo aprendí la lección de que un verdadero padre es el que sabe amar en todo momento a su hijo. Dios nos manda a que seamos personas llenas de amor, para abrazar y besar a nuestros hijos. Si no tenemos hijos, tomémoslo en cuenta; a quienes no les dieron amor de pequeños, eso no es excusa para que no lo hagan; aquí tenemos el padre modelo, lleno de amor.

Expresémosle el amor que tenemos hacia nuestros hijos, sin importar su edad, no nos perdamos esa bendición. Sé que tal vez algunos nunca recibieron ese amor, pero eso no quiere decir que nosotros no lo hagamos.

1ª Corintios 13:5 (BLS): “No es grosero ni egoísta. No se enoja por cualquier cosa. No se pasa la vida recordando lo malo que otros le han hecho”

Si decimos que amamos, para qué vamos a estar recordando lo que nos hicieron; el que no perdona, no avanza. Hay que perdonar, tenemos derecho a ser felices y eso se logra con el perdón. Jamás uses palabras lindas que no sean respaldadas por acciones correctas.